14 / febrero / 2018
Algunas de las principales dudas que surgen al planear una operación de comercio exterior es ¿cuántos impuestos se deben pagar? y ¿me conviene importar éste producto?
Algunas de las principales dudas que surgen al planear una operación de comercio exterior es ¿cuántos impuestos se deben pagar? y ¿me conviene importar éste producto?
Para esta pregunta podemos decir que no hay como tal una respuesta generalizada ya que esto dependerá de la fracción arancelaria que le corresponda al producto.
Pero, ¿qué es la Fracción Arancelaria?
La Fracción Arancelaria es un código por producto especificado en el Sistema Armonizado de la Organización Mundial de Aduanas (OMA), el cual nos determina qué impuestos debe pagar un producto, así como los requisitos para su importación. Las fracciones arancelarias existen prácticamente para todos los productos relacionados con el comercio mundial.
Además del Impuesto al Valor Agregado (IVA) existe una serie de impuestos que pueden gravar nuestras mercancías según su naturaleza, entre ellos el Impuesto General de Importación (IGI) o denominado de manera coloquial como arancel.
Para determinar qué restricciones arancelarias y no arancelarias tiene un producto, se clasifica la mercancía por expertos en la materia, asignándoles una fracción arancelaria a partir de observaciones y/o preguntas como:
- ¿Qué es?
- ¿Cuál es su uso?
- ¿De qué está hecho?
- ¿Cómo funciona?
- Y otras especificaciones técnicas dependiendo del producto que sea.
Es de suma importancia tener la clasificación arancelaria de nuestro producto antes de que se traslade a la frontera de entrada, con la finalidad de anticiparnos y planear el cumplimiento de la ley para el momento de la legalización de nuestra mercancía.
Si requieres mayores informes o asesoría con respecto a este tema, no dudes en contactar a nuestros expertos en Comercio Exterior.
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